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Más de 200 afiliados marcharon contra el IOMA en Alberti: “El hospital no da abasto”


Una multitud marchó en las calles de Alberti contra el IOMA. Los afiliados juntaron firmas para entregarle un petitorio a Homero Giles.



En el distrito de Alberti, la crisis sanitaria generada por la interrupción del convenio entre el Instituto de Obra Médico Asistencial (IOMA) y la Federación Médica de la Provincia de Buenos Aires (FEMEBA) alcanzó su punto más álgido durante la jornada de ayer con la realización de la primera manifestación impulsada por más de 200 afiliados autoconvocados. 

Es que, desde septiembre, los casi 5.000 afiliados de Alberti quedaron sin atención médica del IOMA y por eso promovieron una movilización la Plaza General Arias el jueves pasado. Durante la concentración, los vecinos afectados volcaron su preocupación e incertidumbre frente a la falta de cobertura por parte de la mutual provincial, acompañados de algunos médicos y autoridades de instituciones sanitarias privadas.  

Desde la ruptura entre IOMA y FEMEBA, los afiliados se han visto obligados a cubrir los gastos de atención médica y estudios de manera particular. Algunos incluso deben viajar a otras localidades cercanas para recibir atención, lo que genera un gasto adicional que muchos no pueden afrontar.

“Tuve que hacerme unos estudios en Chivilcoy y pagar todo de mi bolsillo. Ni siquiera me han reintegrado el dinero”, relató Mónica Gotta, una de las afiliadas consultadas en Alberti y de las principales impulsoras de la convocatoria del jueves.

En esa línea, los beneficiarios denuncian que los reintegros, en los pocos casos en que se tramitan, enfrentan demoras significativas y trabas administrativas. “Desde agosto hice el pedido de reintegro y aún no tengo respuesta. Hay personas que llevan más de un año esperando lo que corresponde”, señaló Gotta.

Además de la convocatoria en el centro de la ciudad, quienes vienen llevando adelante el reclamo de los afiliados, impulsaron una juntada de firmas entre los asistentes para acompañar un petitorio dirigido al presidente de IOMA, Homero Giles para que comparezca ante la desidia sanitaria que alcanza a miles de vecinos de Alberti y de gran parte del territorio bonaerense.

Según anticipó Gotta, el petitorio solicita la restitución inmediata de la cobertura médica en Alberti además de dejar explícita la vulneración de derechos de todos los afiliados bonaerenses, quienes han aportado durante años a la obra social y ahora se ven privados de los servicios. “Tenemos que protestar contra IOMA, porque a nosotros nos descuentan ellos, entonces son los únicos contra los que podemos hacer un descargo”, lanzó la entrevistada.

Es preciso mencionar que, sobre una población de 12.000 habitantes casi la mitad son afiliados del IOMA, por lo que el impacto sobre el sistema sanitario es más que significativo. “El hospital local hace lo que puede, pero no da abasto”, explicó Motta, quien resaltó que si bien la atención primaria del hospital municipal es buena, los casos que requieren especialidades o procedimientos complejos deben ser derivados a otras ciudades.

Los vecinos de Alberti denuncian la falta de “apoyo político”

Los vecinos que participaron de la movilización también expresaron su descontento por la falta de respuestas por parte de las autoridades del municipio. “No tenemos el amparo de ningún político de turno. No sabemos si nos va a ir tan bien, pero seguimos adelante”, comentó otra de las organizadoras.

Por su parte, el Círculo Médico de Alberti confirmó que la atención a los afiliados sigue suspendida y que no se han alcanzado acuerdos con la obra social para restablecer los convenios. Si bien algunos médicos de ciudades vecinas han logrado acuerdos individuales con IOMA, los afiliados de Alberti siguen sin poder acceder a una atención médica adecuada en su localidad.

Además, la única clínica local, San Pantaleón, enfrenta serias limitaciones en cuanto a sus prestaciones. El establecimiento médico privado, que cuenta con servicio de internación, no tiene cobertura para cirugías ni prótesis, lo que limita aún más el acceso de los afiliados a tratamientos médicos esenciales.

Esta situación se agrava con la escasez de profesionales en la zona, ya que los pocos médicos disponibles están desvinculados de la mutual lo que ha desatado una crisis sanitaria sin precedentes. “Años de aportes no pueden ser ignorados”, concluyó una afiliada en representación del colectivo de autoconvocados, que según anticiparon seguirán luchando por la restitución de sus derechos, y no descartan nuevas movilizaciones en las próximas semanas si la situación no mejora.

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