Matías Rossi logró en Junín un título histórico en el TC 2000

En el autódromo "Eusebio Marcilla", el fin de semana tuvo condimentos dramáticos desde el inicio, con lluvia el sábado y un cambio de motor obligado en el Toyota Corolla Cross de Rossi por problemas de presión de aceite, lo que postergó todo para el domingo.

 La emoción quebró la voz de Matías Rossi apenas bajó del auto en Junín. No era para menos: con un tercer puesto en la carrera final, el piloto de Del Viso se consagró campeón del TC 2000 y escribió una página inédita en la historia del automovilismo nacional. Fue el primer título logrado por un SUV dentro de la categoría y el sexto en la cuenta personal del “Misil”, que ahora quedó a solo uno de igualar el récord del recordado Juan María Traverso.

Rossi llegó a la definición como líder del campeonato y con un único rival directo: su compañero en Toyota Gazoo Racing Argentina, el joven entrerriano Emiliano Stang. El fin de semana tuvo condimentos dramáticos desde el inicio, con lluvia el sábado y un cambio de motor obligado en el Toyota Corolla Cross de Rossi por problemas de presión de aceite, lo que postergó todo para el domingo.

Una carrera cargada de tensión

En la final, Rossi largó cuarto y Stang sexto. El piloto de Crespo avanzó con decisión en las primeras vueltas, pero la rotura del neumático delantero derecho lo dejó fuera de pelea: debió ingresar a boxes, cayó al último lugar y le allanó el camino al campeonato de su compañero. Con inteligencia y cabeza fría, Rossi bajó el ritmo, cuidó el auto y selló el título con un tercer puesto que valió oro.

La victoria en pista quedó en manos de otro símbolo del TC 2000, Gabriel Ponce de León, quien celebró de local en el Autódromo Eusebio Marcilla con un Corolla Cross del equipo Corsi Sport. Segundo finalizó Franco Vivian con Chevrolet Tracker, completando un podio íntegramente compuesto por SUV. Stang, en tanto, protagonizó una notable remontada para terminar cuarto, ratificando su gran temporada.

Un campeonato que marca época

La consagración de Rossi no solo fue especial por el número: representó el primer campeonato de un modelo SUV en el automovilismo argentino, dentro del proceso de renovación impulsado por la categoría bajo la gestión de la Agencia Tango, encabezada por Alejandro y Diego Levy.

En 2025, el Misil logró dos victorias —en General Roca y en los 200 Kilómetros de Buenos Aires, junto al uruguayo Santiago Urrutia— y construyó un año sólido. “Fue una carrera complicada. Cuando vi lo que le pasó a Emiliano bajé el ritmo y cuidé el neumático. Quería definir el campeonato y eso me generó una descarga emocional muy grande”, reconoció Rossi, visiblemente conmovido.

Ponce de León también se mostró emocionado tras su triunfo: “Nunca me fui del TC 2000. Ganar acá, delante de mi público, es algo soñado. Si mañana me dicen que me tengo que retirar, con esto me retiro”.

A un paso del récord

Este fue el sexto título de Rossi en el TC 2000 (2006, 2007, 2011, 2013, 2020 y 2025): los dos primeros con Chevrolet y los restantes con Toyota. Así, quedó a solo una corona de igualar las siete de Traverso, con quien mantuvo una relación muy cercana, especialmente en los años finales del Flaco ligado a la marca japonesa.

En total, Rossi suma 11 títulos nacionales en distintas categorías, consolidando una de las trayectorias más exitosas del automovilismo argentino contemporáneo.

El TC 2000 cerró 2025 fortalecido tras un año de transición, con 16 autos en Junín y la expectativa de superar las 20 unidades en 2026. El ingreso de los SUV, la recuperación de circuitos históricos y el acompañamiento del público marcan un camino de crecimiento. Y en el centro de esa escena, Matías Rossi volvió a hacer historia.